Ya sabemos que los filtros de partículas de los motores diésel tienen muchos problemas. Hoy vamos a hablar de los problemas con el FAP.
Problemas de contaminación
Tanto FAP como DPF son sistemas de filtro de partículas para motores diésel. Motores que por otra parte han visto muy limitada sus posibilidades legales en lo que a medio ambiente se refiere. Gracias a las medidas de la Unión Europea, concretamente a la Euro 6.
Los motores diésel generan menos productos contaminantes. Es de agradecer una menor emisión de dióxido de carbono, entre otros. Sin embargo la Unión Europea quiere limitar la emisión de otras dos partículas como los benzopirenos y los óxidos de nitrógeno (NOx). Estos dos están presentes en la ceniza que proviene de la quema de gasóleo.
El filtro de partículas atrapa una de estas dos partículas, las sólidas. Se trata de los benzopirenos. Los benzopirenos son responsables del atasque físico que se produce en el filtro de partículas y que deriva en un problema mecánico en el coche.
Cómo se estropea un FAP
Anteriormente en Binary Electronic hemos hablado de lo poco fiables que son los sistemas de los DPF. Esto se debe a un fallo de planteamiento. Si quieres saber más acerca de esto pincha aquí. El FAP, a diferencia del DPF no tiene una reparación inmediata. En la mayoría de los casos el filtro anti-partículas dice adiós para no volver.
El FAP se estropea cuando una conducción no eficiente hace que el filtro se cargue de contaminantes y se obstruya por completo. El problema es que la conducción eficiente en un vehículo no te garantiza dejar de tener problemas con el dichoso filtro.
Pero entonces, ¿cómo se soluciona el problema de los filtros anti-partículas si tanto DPF como el FAP traen problemas?
AdBlue
AdBlue es una marca comercial para llamar al compuesto de urea (urea es el elemento que ves en la foto que ilustra la página) líder en el mercado. Se trata de eso, un sistema de depuración de emisiones a base de urea. Sustituye al filtro de partículas convencional pero tiene también sus desventajas. Se especula que con la revisión de la normativa Euro 6, Euro 6.2, la totalidad de los vehículos diésel tendrán que implantar un sistema como este.
EL AdBlue tiene un coste aproximado por km de 0,4 céntimos de euro, sí, céntimos. Rellenar el depósito urea puede tener sus complicaciones, ya que puede requerir conectar el sistema a una máquina de diagnosis.
