El mecanismo de encendido es muy sencillo pero eficaz. La llave manda una señal al motor cuando entra en el contacto. Cualquier llave es capaz de arrancar cualquier casi cualquier coche, esto es algo que no todo el mundo sabe. Sin embargo el motor sólo dura unos segundos encendido y luego se bloquea gracias al inmovilizador. Es decir, el inmovilizador es un seguro del vehículo para impedir que se mueva después de sufrir un intento de robo. Esto se consigue a través del bloqueo de la unidad de mando del motor.
El mayor motivo por el que un usuario puede tener un problema con el inmovilizador de su vehículo es haber sufrido un intento de robo. Sin embargo existen más razones por las que falla el inmovilizador.
Fallo en el inmovilizador
A continuación nombraremos los principales fallos relacionados con el inmovilizador del vehículo.
- Fallo electrónico: Es posible que el fallo provenga del software propio de la centralita.
- Energía: Puede que al mando sólo le falte la pila, también puede pasar que sea la unidad de carrocería la que tenga una falta de corriente. En cualquier caso, no es de lo peor que podría pasar.
- Fallo en el código: Otro de los errores posibles es que por el deterioro físico de la llave haya perdido el código. Si deja de enviar el código correcto a la unidad de mando, esta no responde.
- Fallo en las conexiones: Es bastante probable y poco problemático pero sucede que en ocasiones el fallo reside en que el cableado no está en buenas condiciones y es incapaz de transmitir la información.
- No existen más códigos: Es posible que el vehículo no tenga los suficientes códigos. En este caso, al intentar arrancar el coche con una llave ajena, el problema sería el mismo. El inmovilizador se activaría.
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